Hablemos de estructuras limitantes
Decime si te pasó: te sentás a dibujar un Mandala… y de repente aparece en tu cabeza una imagen que viste en Pinterest o en Instagram.
Pasa todo el tiempo. Porque estamos tan rodeadas de Mandalas que se nos hace difícil no traer una idea ya hecha cada vez que queremos crear.
Todo lo que vemos nos condiciona. Nada nace de la nada, y nadie llega al mundo sabiendo.
Y no necesito ser adivina para saber que más de una vez intentaste copiar alguno de mis Mandalas 😉
Lo sé. Y tranquila: es parte natural del proceso de aprendizaje.
Pero entonces… ¿cómo salir de ahí? ¿Cómo lograr algo que sea realmente tuyo, original y único?
Un amigo solía repetirme una frase que me encanta:
“Todo es un adentro.”
Eso resume lo que busco enseñarte: mirar hacia dentro, identificar qué imágenes no te representan (aunque se hayan quedado pegadas en tu mente por repetición) y soltarlas.
>> El primer paso es reconocer esos patrones limitantes.
>> El segundo es reemplazarlos por formas y colores que expresen tu identidad.
Y entre esos dos pasos está lo que yo llamo el tiempo de incubación.

Ese momento es como la tierra oscura donde una semilla descansa antes de brotar: invisible, silencioso… pero vital. Es uno de los primeros recursos que vas a practicar en esta formación.
Porque tu alma ya sabe lo que necesita… pero tu mente requiere ese tiempo para acomodarlo.
Todo esto podés vivirlo en primera persona, conmigo a tu lado.
Pero no lo dejes pasar: el curso empieza en unos días y cada vez queda menos tiempo para sumarte.
Si querés dar el salto a tu propio estilo y dejar de copiar lo que ves afuera, este es el momento de inscribirte.
El arte de integrar la numerología en tus Mandalas